Desde el arranque del juego, la afición mexicana se volcó apoyando a Chicago Bulls, a pesar de que Orlando Magic era el local. Los jugadores tardaron un poco en calentar el juego, pero la conexión entre fans y equipos era absoluta.
El primer cuarto fue para los Bulls 26-24, con buenas canastas, sobre todo de Zach Levine y Wrndell Carter. El segundo cuarto fue ahora del Magic al finalizar 51-46 para dar paso al descanso.
El tercer cuarto se apretó aún más, los Bulls trataron de acercarse, pero varios errores debajo del aro no lo permitieron. Y a pesar de que eran ovacionados por la mayoría del público no lograron su objetivo al terminar 71-77 a favor de Orlando.
El último cuarto fue el más emocionante, lleno de triples y jugadas abajo del aro. Con menos de dos minutos por jugar, el duelo estaba empatado, pero ahí Orlando demostró tener más concentración para ganar 97-91.