Cannabis medicinal: entre el tabú y la calidad de vida en la enfermedad

Iglesia se pronuncia en contra; familiares de paciente ven un gran avance. 

 

NORMA RAMÍREZ / VÍCTOR BARRÓN

 

Mientras que familiares de una pequeña que superó al 100 por ciento las crisis convulsivas que sufría gracias al tratamiento a base de marihuana consideran un gran avance que se aprueba la legalización del cannabis medicinal, el obispo de Piedras Negras, Alonso Garza Treviño, se mostró en contra de esta legislación y señaló que será algo negativo que pone en riesgo a la sociedad.

 

El Obispo recordó que estas acciones se consideran dentro de lo que el Papa ha denominado como la cultura de la muerte, lo cual no es benéfico para la comunidad, por lo que hizo un llamado a los diputados para que se privilegie la salud y la seguridad pública.

 

El prelado dio a conocer con tristeza la falta de, ahora sí, encuestas públicas o foros en donde se dieran a conocer los puntos de vista de los diferentes sectores de la población entre ellos la Iglesia.

 

Consideró que los profesionales y algunos de los consumidores aseguran y son testigos fieles del daño físico y psicológico producto del consumo de esta hierba.

 

En donde se pone en grave riesgo tanto al consumidor como a los que lo rodean, además no se atiende el problema de raíz, solo se pone algunas condiciones para su consumo pero no se suma al bien común solo se dio con esto gusto a algunas personas y en fuerte peligro a la sociedad sobre todo a los  jóvenes quienes verán el consumo de esta como algo normal.

 

Garza Treviño indicó que el Papa Francisco lo ha llamado la cultura de la muerte por tal motivo los  miembros del Arzobispado se unen para pedir a los diputados privilegien al bien de la comunidad.

 

“No es cuestión de normas o no normas, sino que existan o no existan y los anteriores gobiernos habían trabajado mucho para su combate y el regularla no es la solución para bajar el consumo sino   la prevención y dar las condiciones a la sociedad para evitar su uso”, sentenció.

 

Voto a favor 

 

Ángel Rivera López, abuelo de Emili Zoé, niña torreonense que padece síndrome de Lennox Gastaut y que superó al 100 por ciento las crisis convulsivas gracias al tratamiento de Cannabidol, opinó que la discusión a nivel legislativo en lo referente al uso medicinal de la marihuana representa un avance en la lucha de aquellos pacientes que buscan acceder al aceite de cannabis y no cuentan con recursos para adquirirlo.

 

Dijo que mientras para algunos sectores el tema de la marihuana medicinal sigue siendo tabú, para pacientes como la pequeña Emili Zoé, esto ha se ha traducido en calidad de vida, luego de casi 5 años sin sufrir convulsiones gracias al uso del CBD.

 

Dijo que una vez que la Cámara de Diputados libere los puntos estratégicos entre los que se encuentra el relativo al uso clínico de la marihuana, se sabrá si las condiciones cambian a favor de los pacientes que así lo esperan; por lo pronto es una ventaja que el tema sea retomado tras varios años en la congeladora.

 

“No es un gran salto, sino es un paso más que se da dentro del movimiento cannabico medicinal para que la gente tenga una calidad de vida dentro del padecimiento”

 

“Porque tenemos mucha gente que está enferma y se quiere tratar con el aceite, pero pues lógicamente por las dimensiones que tenemos ahorita, también el precio no nos ayuda demasiado”, manifestó. 

 

Y es que a pesar de que el producto anteriormente se importaba de Estados Unidos y hoy en día ya se produce en México, el CBD sigue siendo un medicamento inalcanzable para las familias de escasos recursos.

 

Ángel Rivera dijo que el aceite de cannabis sería útil para personas con dolor severo, en casos agresivos de cáncer, Alzheimer, Mal de Parkinson, pie diabético, esclerosis múltiple, entre otros. 

 

“Este aceite no es que sea milagroso, es un extracto que te da calidad de vida dentro del padecimiento, te controla las enfermedades y aparte tiene mucho beneficio porque se maneja como antibiótico, antiséptico, anti inflamatorio, es antiviral”.

 

Dijo que la decisión que se tome en San Lázaro definirá si los mexicanos que ven pasar los días sin una solución a sus padecimientos, podrán finalmente acceder a esa calidad de vida que hasta el momento no han podido encontrar por medio de los tratamientos que reciben.