Fuerzas de seguridad chilenas han violado protocolos: INDH

Santiago, 7 Ene (Notimex).- El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) se reunió hoy con la comisión legislativa que analiza la acusación constitucional contra el intendente de Santiago, Felipe Guevara, y señaló que las fuerzas de seguridad han incurrido en prácticas violatorias de sus propios protocolos durante las manifestaciones.

Durante la crisis social que vive Chile, elementos del Estado han perpetrado detenciones arbitrarias, dispersiones injustificadas, uso abusivo de sustancias lacrimógenas, disparos de lanzagases contra el cuerpo, falta de gradualidad en el uso de la fuerza, además de que carabineros y militares han intervenido las marchas sin identificarse de manera adecuada, señaló el jefe regional del INDH en Valparaíso, Fernando Martínez, en su visita a la Cámara de Diputados.

El derecho de reunión debe ser garantizado por el Estado, indicó el defensor y evaluó junto a legisladores la acusación que asegura que las actuaciones de Guevara han vulnerado la libertad de expresión, el derecho de reunión y el principio de legalidad, en el marco de la crisis social que atraviesa Chile desde octubre de 2019.

“Lo que tiene que hacer la autoridad administrativa no es solamente no violar los derechos humanos sino que debe garantizarlos, en ese sentido, la autoridad administrativa debe preocuparse de que la forma en que administran todos los recursos del Estado para que los derechos puedan ejercerse cumplan con los estándares internacionales”, declaró el funcionario del INDH.

El marco jurídico que regula el derecho de reunión en el país está obsoleto porque lo somete a un sistema de autorización previa, acusó.

Sólo en Santiago se observaron 226 manifestaciones entre el 18 de octubre, día en que comenzaron las protestas, y el 30 de noviembre, y las fuerzas policiales incumplieron los resguardos necesarios, agregó el defensor. En un 56 por ciento de las movilizaciones consideradas, Carabineros utilizó agentes químicos de manera masiva e indiscriminada, además de hacer uso excesivo de la fuerza.

Además, en un 33 por ciento de casos se registró que el carro que lanza agua para dispersar a los inconformes apuntó directamente el chorro contra el cuerpo de las personas, con afectaciones entre personas que protestaban y personas que no.

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