Neosolteros: un nuevo estilo de vida

REDACCIÓN

 

Ser neosoltero es un estilo de vida, en el que no sólo se elige prestar especial atención en el cuidado personal, si no que también se opta por vivir solo y no casarse. A los neosolteros les gusta cuidarse, vestirse bien, estar al pendiente de la moda, practicar ejercicio y dedicar tiempo a sí mismos.

 

Este estilo de vida ha tomado más importancia con la generación millennial, debido a que cada vez más jóvenes y adultos optan por este estilo de vida.

 

No hay que confundirse. Ellos no rechazan la idea de estar en pareja, pero no les atrae el matrimonio ni la idea de formar una familia. No significa que no encuentren a la persona indicada para compartir el resto de su vida, lo que ocurre es que ellos mismos optan por permanecer solteros y no es algo que les preocupe.

 

“No se trata de egoísmo, pues una persona casada también puede ser muy egoísta. Lo que buscan los neosolteros es disfrutar su independencia y su individualismo, explotarlos al máximo para satisfacer sus objetivos y alcanzar sus metas”, detalló la psicóloga Diana Camacho.

 

Quienes escogen este tipo de vida enfocan toda su energía en el trabajo y los proyectos individuales, pues el éxito es su principal meta. Por lo tanto, compartir la vida con otra persona puede resultar un obstáculo para alcanzar sus objetivos.

 

¿Cuáles son las características de los neosolteros?

 

• Disfrutan estar solos
• Aman su libertad
• Apuestan por un estilo de vida con valores individualistas
• Se preocupan por el éxito profesional, la salud y la belleza
• Les gusta viajar y consumir lo más nuevo en tecnología
• Prefieren salir a cenar, a espectáculos, etc., antes que quedarse en casa con un plan familiar
• Se inscriben a clases que les permitan alcanzar sus metas profesionales, tener una buena salud y cuidar su aspecto físico (diplomados, yoga, cocina, gimnasio, etc.).
• En el aspecto sexual son selectivos y no se relacionan con cualquier persona, aunque tampoco se abstienen de tener relaciones sexuales.

 

Y tú, ¿te consideras neosoltero?