Las lecciones de Durango

LUIS GUILLERMO HERNÁNDEZ ARANDA

El triunfo de Esteban Villegas para convertirse en el próximo gobernador de Durango, deja muchas enseñanzas con miras a las próximas elecciones del 2023 y 24. La primera es que Morena no es invencible. Esteban Villegas vino de atrás, inició abajo en las encuestas. Recordemos que mientras Morena ya tenía a Marina Vitela como candidata y llevaba un año haciendo precampaña tras retirarse de la alcaldía de Gómez Palacio, en diciembre apenas se concretaba la alianza en Durango entre PRI-PAN-PRD con Villegas a la cabeza.

A pesar de un escenario adverso, Esteban Villegas operó y junto con amigos cercanos logró los acuerdos para que el panista Toño Ochoa fuera el candidato a la alcaldía de Durango, la señora Lety Herrera en Gómez Palacio y Homero Martínez también por el PRI en Lerdo. En estos tres municipios radica el mayor peso electoral de Durango. En todos ganó la Alianza prácticamente 2 a 1. Se dejaron atrás los egos y se trabajó en equipo por un objetivo: derrotar a Morena. 

La segunda gran enseñanza es que los candidatos sí importan. Cuando las encuestadoras preguntaban por quién iban a votar sin mencionar nombres de candidatos, Morena sumaba un alto porcentaje de las preferencias, sin embargo, al poner el nombre de Marina Vitela la intención de voto disminuía. Caso contrario al de Esteban Villegas, cuya imagen sumaba a un devaluado PRI que en Durango era la tercera fuerza política y que hoy después de los resultados del domingo es la primera fuerza. En la ciudad de Durango y Gómez Palacio, Morena apostó por malos candidatos y perdió.

La tercera enseñanza es que la gente castiga. La administración de Marina Vitela en Gómez Palacio se caracterizó por varios escándalos, nepotismo, malos servicios primarios, inseguridad, malas obras. De ahí que en Gómez Palacio, donde radicaba la fuerza de Morena, Esteban Villegas sacó muchos más votos que la ex alcaldesa.

Una semana previa a la elección Reforma y El Universal publicaron reportajes donde denunciaban desvió de recursos durante la administración de Marina Vitela además de evidenciar que era dueña de 25 propiedades. Cuarta enseñanza: quien vaya a ser candidato no debe tener pecados en el closet porque tarde o temprano todo sale a la luz pública.

El que se enoja pierde, en campaña es muy importante el control emocional. Hace 6 años Esteban Villegas perdió una gubernatura por un ex abrupto en televisión y aprendió la lección, hoy nunca se le vio molesto y siempre fue amable con todos los sectores de la sociedad. En frente, la candidata de Morena perdió en varias ocasiones los estribos.

Mientras en Durango José Rosas Aispuro no tiene una buena calificación como gobernador, en Coahuila Miguel Riquelme es el mejor evaluado del país, así que el próximo candidato tiene una gran plataforma de despegue.

Ya inició la cuenta regresiva para la elección por la gubernatura de Coahuila en el 23 y el panorama se ve alentador para los partidos opositores de Morena, siempre y cuando dejen la soberbia a un lado y se pongan a trabajar.

 

@lharanda