Los Foros por la Paz planteados por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, siguen su curso tal y como su equipo lo tenía planeado en la agenda.
Aunque los resultados no han dado luz verde a la llamada “ley de amnistía”, más sectores de la población se muestran interesados por ser parte de las discusiones en busca del proceso de pacificación que México requiere.
La tarde de este jueves 16 de agoto, la Conferencia del Episcopado Mexicano emitió un comunicado de prensa en el que informaron que se sumarán a los foros por la paz.
“La Iglesia no sólo colabora al bien común con sus enseñanzas y Doctrina sino también abriendo espacios para el encuentro, el diálogo y la construcción de paz”, se lee en el comunicado. “La Conferencia del Episcopado Mexicano, como parte de su misión, aceptó la invitación formal del Presidente Electo, el Lic. Andrés Manuel López Obrador, para participar en los foros de consulta para trazar la ruta hacia el Pacto de Reconciliación Nacional”.
De acuerdo con el comunicado, el Episcopado Mexicano calificó dichos foros de escucha como “un espacio de diálogo convocados para identificar las propuestas
de los diferentes sectores de la población en diversas regiones del país y que éstas se conviertan en insumos para la elaboración de políticas públicas que permitan avanzar en la superación de la violencia, la construcción de la paz y la reconciliación nacional”.
El Presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, José Francisco Cardenal Robles Ortega, encomendó a Monseñor Carlos Garfias Merlos, Arzobispo de Morelia, y Responsable de la Dimensión Episcopal de Justicia, Paz, Reconciliación, Fe y Política, para que sea él quien coordine el ofrecimiento a nivel nacional, de las aportaciones y recursos pastorales, que sobre este tema, la Iglesia católica se ha esforzado en implementar a lo largo de los años en nuestro país.
El Episcopado informó que también invitaron a los señores obispos a aceptar libremente la solicitud de AMLO, para que puedan participar ellos mismos o algún sacerdote, religioso o laico delegado en cualquiera de los foros que estén más cercanos a su diócesis.
“Estos foros pueden ser una ocasión propicia para compartir con audacia, paciencia y sabiduría, las riquezas del evangelio, de manera serena y comprendiendo la pluralidad de visiones presentes en nuestro país, y así colaborar todos juntos, de manera positiva en la solución de conflictos”, concluyó el texto.
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