Son enanos con visión corta y cerebro limitado

Por: David González

Los diputados son “agachones”, “levantadedos” y “achichincles” del gobierno en turno que una vez más traicionan a la ciudadanía al darles la espalda y cuidar sólo los intereses del gobierno saliente.

Así coincidieron el excandidato a la gubernatura de Coahuila, Guillermo Anaya Llamas, el líder estatal del Partido Acción Nacional (PAN), Bernardo González Morales, y el expresidente de este instituto político, Carlos Orta Canales, al señalar también que esto ha provocado que la entidad sea una vergüenza nacional en el tema legislativo.

Quien encabeza también el Frente por un Coahuila Digno y exaspirante a la gubernatura, Anaya Llamas, calificó como “lamebotas” a los diputados de la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que son mayoría, y lamentó que en nada ayuden a hacer un congreso plural.

Deploró los grandes sueldos que perciben y que no desquitan; al asegurar que los coahuilenses les pagan todos los días de sus impuestos y los legisladores simplemente no cubren con su trabajo el salario.

Dijo que siguen bajo la etiqueta de “levanta dedos” por no aportar nada y calificó a esta sexagésima legislatura como una vergüenza.

“Se la pasaron sin hacer absolutamente nada en favor de la ciudadanía y están sólo al servicio del estado y hoy pagamos las consecuencias en falta de infraestructura, seguridad, empleo, además de la falta de transparencia y rendición de cuentas”.

El dirigente albiazul, González Morales, calificó como una vergüenza lo que ha pasado al interior del recinto legislativo de la entidad, donde su salida sólo refleja un trabajo  pobre y lleno de aristas en el que su labor dio mucho que desear, pues sirvieron para cuidar sólo los intereses de la administración que está por concluir.

“La verdad es que es una vergüenza lo que ha estado pasando en el sentido de que han sido serviles y para ejemplo lo que acaba de pasar con la reestructuración de la deuda pública”. Destacó que esas acciones más que cuidar el bienestar de los coahuilenses, los afectan por generaciones, por las leyes a modo que aprueban para cuidar el bienestar de quien los puso y no el de la comunidad para la que deben colaborar. Lamentó que sigan con la actitud de “levantadedos”.

La LX Legislatura de Coahuila inició su gestión en 2015 y culminará el 31 de diciembre, y actualmente está compuesta por 25 diputados de los que 16 son emanados del PRI, con la mayoría en las decisiones que se toman, mientras que nueve son de minoría y de otros partidos.

Legislación pobre

El exlíder del PAN estatal, Orta Canales, calificó como muy pobre la gestión de esta legislatura y lamentó que desperdiciaron estos tres años la oportunidad de haber cambiado el rumbo del estado y enderezar lo torcido del sistema y la oportunidad de ser un Congreso libre, soberano e independiente.

“Lamentable y pobre el desempeño porque elegimos a los mismos enanos con visión corta y cerebro muy limitado, permitiendo principalmente obedecer las órdenes y la línea que les marcaron desde el Palacio Rosa”.

Apuntó que una vez más demostraron cada uno de los legisladores ser comparsa, pues la mayor parte de las iniciativas aprobadas en el seno fueron sólo las que envió el Ejecutivo.

“Los diputados locales son levantadedos, achichincles y agachados; son vergüenza porque lo vimos y lo sentimos. El trabajo de los diputados qué lástima, tuvieron la oportunidad de ser una legislatura brillante donde ahora sí obedecieran a la representación ciudadana y no lo hicieron”.

Por lo pronto, en el sitio oficial del Congreso se cita a los diputados a la decimaprimera sesión del segundo periodo ordinario, del tercer año de ejercicio constitucional, que tendrá lugar el día martes 3 de octubre de 2017, a las 11:00 horas, en el Salón de Sesiones del Palacio Legislativo Venustiano Carranza.

Se destaca que el Congreso es independiente, libre y soberano, conforme a lo dispuesto en el artí- culo 64 de la Constitución Política del Estado de Coahuila de Zaragoza y los artículos 82, 83, 84, 86, 239 y demás relativos de la Ley Orgánica del Congreso. Al cierre de esta edición no hubo pronunciamiento.