Visitas de Aurelio Nuño a Coahuila han sido para reconocer avances

En un mes, las dos visitas de Aurelio Nuño Mayer a Coahuila han sido para reconocer avances en la entidad y no para meter en cintura a profesores estatales, como ha tenido que hacerlo en Guerrero, Oaxaca o Michoacán.

“El Joven Maravilla” como conocen al secretario federal, es uno de los personajes del gabinete peñista que más “bonos” acumuló en los últimos meses, al ser considerado presidenciable rumbo a la elección del 2018.

Nuño logró en unos meses lo que su antecesor, el mexiquense Emilio Chuayffet Chemor no pudo hacer en años: imponer la reforma educativa en entidades donde los grupos de la CNTE están enquistados, impidiendo el crecimiento y las mejoras en planteles de nivel básico.

En febrero, la primera agenda en el año que atendería en esta entidad en secretario Aurelio Nuño, fue pospuesta. Y a principios de mayo, Coahuila fue sede de la Segunda Reunión Regional de Educación que convocó a gobernadores y a secretarios del ramo de Durango, Nuevo León, San Luis y Tamaulipas.

Ayer estuvo en San Buenaventura, en la Universidad Politécnica, donde dialogó con maestros destacados y alumnos coahuilenses. En su discurso Nuño dijo algo interesante: “quiero platicar con ustedes, poderlos conocer, poderlos escuchar y poder tener un pulso directo de lo que sucede en las escuelas y en las universidades de México”.

Habría Firmas y Señales si eso mismo, el “tomarle el pulso a la gente”, hicieran funcionarios federales de todas las áreas. La atención directa a los ciudadanos no sería tan deficiente y tortuosa como lo es ahora…