Está que arde

Julián Parra Ibarra

Nunca antes como en estos momentos, el país se había visto envuelto en una crisis de incendios forestales, o por lo menos no que yo lo recuerde. Hasta el Corte de las 20:00 horas del lunes, la Comisión Nacional Forestal (Conafor) reportaba la existencia de 82 siniestros ‘vivos’ en 21 entidades del país, y la imagen satelital que nos muestra a nuestro país, es verdaderamente dramática, preocupante, si no es que ya alarmante, porque cubre a la mayoría del territorio nacional.

Las cifras de la Conafor son para asustar a cualquiera, ya que se han consumido 19 mil 564 hectáreas hasta el momento, algo así como la mitad del territorio total del estado de Aguascalientes. Ocho de estos incendios forestales, se registran en áreas naturales protegidas.

Según los reportes de la dependencia federal, Oaxaca es el estado que reporta el mayor número de siniestros con 11, seguido por Jalisco, Michoacán y Guerrero. Luego está Chiapas con 10 y Durango con nueve.

Desgraciadamente en la mayoría de ellos ha tenido algo que ver la mano del hombre, no tanto por comisión, pero sí por omisión, porque acudieron al campo y encendieron una fogata que no fue apagada de manera correcta, porque lanzaron una colilla de cigarro, por tirar basura en cualquier parte a cielo abierto y cuya composición provoca la generación de gases, o porque los vidrios tienen el efecto lupa al contacto con el sol.

Lo peor de todo es la poca conciencia que se tiene sobre este gravísimo problema, y sólo atrajo la atención de los principales medios de comunicación ‘nacionales’, cuando producto de los incendios que las zonas que circundan la Ciudad de México, provocaron una crisis en la calidad del aire que se respira en la capital del país.

Y para muchos lo peor es cuando la Liga de Futbol MX anuncia que debido a las condiciones ambientales en la Ciudad de México, “se ha establecido contacto con las autoridades de Protección Civil, con el fin de determinar si existen las condiciones adecuadas para desarrollar el partido América Vs. León, programado para el miércoles 15 de mayo de 2019”.

A muchos parece no importarles que el país se esté literalmente incendiando, ¡pero se imagina que se suspenda un juego de semifinales del futbol mexicano!

La cosa está que arde, y creo que nos debería llamar a la conciencia de todos los mexicanos, y todos, cada uno desde el ámbito de su competencia, aportar un granito de arena, a lo mejor no para ir a sofocar los incendios en curso, sino para evitar en lo futuro que un escenario como éste, se vuelva a repetir.

[email protected]

@JulianParraIba