Laura Estrada
Ante las reformas laborales, las pequeñas y medianas empresas intentan sobrevivir, aseguró Saúl García Ibarra, empresario de Acuña, quien dijo, los propietarios de negocios analizan herramientas administrativas para soportar la carga financiera, ya que a diferencia de las grandes industrias, ellos no cuentan con presupuestos de reserva, ya que sus ingresos provienen de la venta local diaria.
Explicó que se encuentran en un estancamiento financiero, ya que en el último año no ha repuntado la economía de las pymes, ya que han hecho frente a la carga tributaria —que implica las reformas al salario mínimo, a las vacaciones y otras obligaciones que tienen que cumplir— lo que se refleja en un aumento de precios de sus bienes y productos, pero al verse obligados a este incremento también afrontan una competencia que afecta sus ventas.
Manifestó que se han reunido los propietarios de pequeños y medianos negocios para buscar opciones y herramientas administrativas que les permitan hacer frente a esta situación, ya que a diferencia de la industria, los comerciantes viven de las ventas diarias y no cuentan con reservas o presupuestos respaldados, lo que coloca a las pymes en una situación económica delicada y en juego empleos locales.
Hizo ver que como empresas son generadoras de importante cantidad de empleos en la ciudad y pago de impuestos, por lo que buscan la manera de incentivar sus negocios, pese al alza de precios.
Refirió que espera que las reformas laborales sean para bien de los propios trabajadores y que también estén dispuestos a pagar los incrementos de los bienes y productos que comercializan los pequeños y medianos empresarios.
“Esperemos que sea para bien de la mayoría de la gente, pero para los pocos empresarios que somos los que generamos el empleo, que somos los que generamos el impuesto, que somos los que generamos las alternativas de mejorar la economía en una comunidad que no se ve muy placentera la situación hasta ahorita, esperemos que las cosas cambien“, concluyó.