LESLIE DELGADO
Este martes Día de las Madres, el Panteón Santiago lució abarrotado por la población que acudió a visitar a sus familiares. En el caso de la señora Benita Torres, como cada año fue a pasar un rato con su abuela, madre e hija que se encuentran sepultadas en una cripta familiar.
“Es una cosa espantosa que a veces ni al peor enemigo se lo deseo, porque es un vacío que queda en el alma, en el corazón y en el hogar, para una de madre no hay consuelo de nada, pueden pasar años y años, pero el hueco sigue en el alma”, expresó.
“Una ya celebra diferente como madre, porque vive, uno porque tiene que vivir, ríes porque tienes que reír, pero perder un hijo no tiene nombre”, agregó la señora.
En este 2022 se permitió el acceso de los visitantes bajo las recomendaciones sanitarias, incluso se había mencionado que no se permitiría la presencia de agrupaciones musicales y personas que limpian las tumbas, sin embargo, esta restricción no se respetó puesto que había músicos interpretando melodías.