Obligaciones y derechos I

HUGO DÍAZ AGUILERA

El pasado fin de semana tuvo lugar un hecho por demás bochornoso en una de las calles de Sabinas, sucesos de esos que por algún momento se pensaron superados, y que gracias a diversos factores, muy poco probables de repetirse; Sin embargo, ocurrieron.

Sucede que elementos de la policía municipal comenzaron la persecución de un grupo de jóvenes que causaron disturbios en un evento realizado en la vía pública, la persecución rindió frutos y pronto pusieron en “18” (detenido) a varios de los causantes de esos hechos. Sin embargo los uniformados no pudieron salvarse de la embestida de un colectivo de jóvenes que acompañaban a los detenidos que trataron de impedir la detención.

Durante el forcejeo entre los policías y los chavos quedaron en evidencia prácticas que durante contingencias de este tipo se siguen dando: falta de pericia por parte de la policía para atender reportes de grupos que faltan al orden y al buen gobierno, según el director de policía se sabía que los reportados podían portar armas punzocortantes por lo que se tuvo que actuar de esa manera.

Un video en redes sociales dio parte de esos hechos y la peor parte, en materia de comentarios negativos  se la llevaron los policías, pocos fueron los internautas que empataron con los uniformados para pensar la manera de actuar ante una muchedumbre que les llevaba ventaja numérica y muy probablemente con armas punzocortantes que podrían haber usado en cualquier momento.

De acuerdo con el artículo 115, fracción II de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; el artículo 158-U de la Constitución Política del Estado de Coahuila de Zaragoza,  el departamento de Seguridad Pública en Sabinas tiene entre sus facultades mantener la tranquilidad, la seguridad y el orden público en el municipio.

Además prevenir la comisión de delitos y proteger a las personas, a sus propiedades y sus derechos. Por parte de los chicos, también se observó algo que se piensa no va a ocurrir, la agresión a un servidor público. 

En el 2019, el diputado Marcelo Torres presentó una iniciativa que fue aprobada por unanimidad que consiste en tipificar como delito dentro del código penal para Coahuila la violencia contra miembros de instituciones de seguridad  pública.

El legislador argumentó entonces para esa iniciativa que así como existen sanciones para los servidores públicos y de corporaciones que cometen abuso de autoridad de igual manera necesita sancionarse a ciudadanos que lesionan, agreden a servidores públicos que buscan mantener el orden y la calma.

Entre otras facultades del departamento de “Sierra Papa” (claves de la policía municipal) está la de aprehender a los presuntos delincuentes en los casos de delito flagrante, poniéndolos sin demora a disposición del Ministerio Público.

La segunda parte de esta columna la próxima semana.