Nuestros héroes forestales

ÁLVARO MOREIRA

México se ubica dentro de los países latinoamericanos con mayor pérdida de cobertura arbórea en la última década. En este fenómeno, los incendios forestales son uno de los grandes factores que provocan que miles de hectáreas sean reducidas a cenizas, los animales huyan de sus hábitats y se tengan que congregar esfuerzos que ponen al límite la voluntad humana.

En 2021 se registraron 7, 337 incendios forestales en las 32 entidades federativas, lo que representa un aumento de 24% en comparación con el año anterior y requirió la unión de más de 363 mil días-persona aplicados en combate, entre brigadistas federales, estatales y municipales, elementos del ejército y la Guardia Nacional, de protección civil y voluntarios. En el caso particular de Coahuila, con 68 incendios ocurridos durante la primera mitad de este 2022, desafortunadamente se ha superado el total de los siniestros presentados el pasado año (53).

Detrás de cada uno de estos acontecimientos existen mujeres y hombres que arriesgan su salud, su vida e integridad para sofocar el fuego y detener su daño hacia la población y los ecosistemas.

Los combatientes forestales son todas las personas que integran las brigadas, bomberos, guardaparques y voluntarios que participan en las acciones de prevención y control de los incendios forestales. Al enfrentar el fuego, se arriesgan a sufrir quemaduras y lesiones. Pero las llamas no son el único peligro, pues están expuestos a intoxicación por humo y asfixia, deshidratación, insolación, infartos, hemorragias, mordeduras o picaduras de animales, entre muchos otros. A pesar de todo están ahí, en la primera línea de batalla.

Para reconocer su importante labor, valentía y profesionalismo, el próximo 11 de julio se conmemora en el país el Día Nacional del Combatiente de Incendios Forestales. Aprovechemos este momento para rendir un homenaje a todos ellos, a quienes están en activo y a los que, lamentablemente, han perdido la vida luchando contra estos fenómenos.

Como lo he hecho antes, desde mi función como legislador seguiré promoviendo acciones que permitan fortalecer el trabajo que realizan estos hombres y mujeres, y mejorar a su vez las medidas de prevención y protección de todos.

Me despido de ustedes amigos, esperando reunirnos de nuevo, por este medio, la próxima semana. Que Dios los bendiga.