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El campo coahuilense, otro abandono de la Federación

Álvaro Moreira. Foto: Especial

Álvaro Moreira. Foto: Especial

21 de Febrero 2022

ÁLVARO MOREIRA

De fuerte vocación agrícola y ganadera, el campo de Coahuila es uno de los más importantes del país, siendo origen del alimento diario de millones de mexicanos.

Durante muchos años, nuestra tierra ha sobresalido por la calidad de sus productos. Superando las condiciones ambientales y adversidades climáticas, el sector rural destaca nacional e internacionalmente.

Por ejemplo, en el caso de la región sureste, sobresalen sus cultivos de forraje, melón, manzana, nuez, papa, trigo, maíz, ixtle y candelilla; en la actividad pecuaria el ganado ovi-caprino, bovino de carne y una industria avícola de gran auge y desarrollo.

Pese a ello, nuestra gente del campo permanece en abandono por parte del gobierno federal, que le ha cerrado las puertas y negado los recursos que tanto requieren para mantener su productividad.

Y es que los recursos federales para este rubro se han reducido de forma constante en lo que va de la administración de Morena, dejando fuera de los principales programas a los agricultores y ganaderos coahuilenses.

El desinterés mostrado por el ejecutivo federal plantea un panorama adverso para el sector agrícola durante el presente año 2022, en el que se vislumbra enfrentarán también factores como el alza de precios, la sequía y restricciones comerciales como las que hoy viven algunos frutos mexicanos.

Lo bueno es que el gobernador Miguel Riquelme sabe muy bien que, en Coahuila, el campo no puede parar. Por eso, desde el estado y con recursos propios se mantiene el respaldo a sus productores para que continúen incrementando su rendimiento. Estas acciones han permitido aumentar el liderazgo de esta entidad y consolidarnos en los primeros lugares del país.

En mi labor como legislador, refrendo mi compromiso con las mujeres y hombres del campo coahuilense. Seguiré alzando la voz y exigiendo que nuestra gente sea considerada en los proyectos y programas, y que se asigne el recurso necesario para fortalecer este importante sector.

Me despido de ustedes amigos, con la confianza de que nos encontraremos en este medio, de nuevo, la próxima semana. Sigamos cuidándonos y que Dios los bendiga.