Diana "Oro" Martínez

HUGO DÍAZ AGUILERA

El título de esta columna no responde a ningún error de dedo ni desconocimiento del nombre real de la persona en cuestión, mucho menos un error de los compañeros que llevan a cabo la revisión final previa a la publicación, el título responde a una expresión muy arraigada en el norte de Coahuila cuando se considera que  una persona cuenta con cualidades humanistas y que valora al ser humano y la condición humana.

Hoy resaltaremos el accionar de una mujer que hace un año mostró habilidades para demostrar que en la política partidista de México no todo está mal y que los políticos con buenas acciones pueden recobrar la confianza de los ciudadanos, una confianza ya por demás deteriorada.

No son pocos los que han reprobado el trabajo de mi amigo el regidor Remberto Hernández Cárdenas, producto de su salida obligada del Partido Revolucionario Institucional – Con Remberto hablé vía telefónica para responderle su mensaje de texto en el que me agradeció mis buenos deseos de recuperación para él y quedé a sus órdenes- mediatizando de manera acre las denuncias que en su carácter de priista jamás realizó.

El edil investido en el traje de Movimiento Ciudadano tuvo un percance automovilístico del cual resultó ileso. Fue hace aproximadamente una semana cuando al circular por la autopista premier producto de la alta velocidad, una dormitada y lo accidentado del pavimento en la autopista que sobrevino la salida de camino y volcadura provocando la pérdida total de la unidad automotriz. De acuerdo con lo que me platicó fue un conocido mutuo el que le ayudó a llegar a la ciudad y acudir a un hospital para realizarse un chequeo.

Cuando platiqué con él, le dije que dentro de lo malo que bueno que viajaba solo y me comentó (medio serio y medio en broma) que hubo quienes pensaron que viajaba con el profe Pepe Enríquez, pero no fue así. En la red social de Remberto le pegan duro y macizo a la maestra Díana Haro, ya solo falta decir que por su culpa hay escasez de agua y no llueve en Sabinas, pero en fin, los políticos a eso y más se exponen.

Estando en el centro médico de Sabinas aún convaleciente de los golpes recibidos por el accidente el regidor recibió una visita por demás inesperada, tanto para él, como para quienes comulgan con su forma de hacer las cosas, la alcaldesa lo visitó personalmente primero para ponerse a las órdenes de la familia del edil, después para conocer su estado de salud y finalmente para sostener una charla en la que la primera autoridad del municipio le deseó parabienes y pronta recuperación porque el cabildo lo necesita.

Desde la campaña Diana Haro comentó que no tiene la cultura de ocuparse a responder ataques malintencionados, y que en su cabildo todas aquellas críticas que busquen un mejor Sabinas para los Sabinenses son bienvenidas. Tengo un amigo columnista que suele terminar algunos de sus trabajos escribiendo así… Nobleza obliga.