La disputa por el territorio
Rubén Aguilar Valenzuela
Al inicio del gobierno que encabeza la presidenta Claudia Sheinbaum, en gran parte del país hay una disputa por el control del territorio entre grupos del crimen organizado, como lo reconoce el secretario de la Defensa, Ricardo Trevilla Trejo.
Lucha intensa y despiadada, que viene de tiempos del sexenio anterior y que ahora se concentra en siete estados de acuerdo a una investigación de El Universal (17.11.24): Sinaloa, Sonora, Guerrero, Chiapas, Estado de México, Guanajuato y Querétaro.
El enfrentamiento tiene lugar entre grupos del crimen organizado con presencia en tres o más estados: Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG); Cártel de Sinaloa (CS); Cártel del Golfo (CDG); Los Zeta (CZ); Cártel del Noroeste (CDN); La Familia Michoacana (FM); Los Caballeros Templarios (CT) y Cártel de los Beltrán Leyva (CBL).
A estos grupos se añaden otros de carácter local como el Cártel de Santa Rosa de Lima (CSRL), que opera en Guanajuato. En el país hay ahora más de 100 grupos del crimen organizado con presencia en menos de tres estados.
De acuerdo al titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García, la disputa en Querétaro y Guanajuato, que se ha agudizado en las últimas semanas, es entre el CJNJ y el CSRL.
En Sinaloa, el enfrentamiento ocurre a partir de la fractura del CS, entre Los Mayos y Los Chapitos, después de que se tomara preso a Ismael Zambada, El Mayo. Frente a estos hechos, el general Francisco Jesús Leana Ojeda dijo que el conflicto “no depende de nosotros, depende de los grupos antagónicos”. Esta batalla se extiende al vecino estado de Sonora.
La disputa en Guerrero ocurre entre dos grupos locales, Los Ardillos y Los Tlacos, que en versión de las autoridades se disputan el control de Chilpancingo, la capital del estado. En el Estado de México el enfrentamiento es entre el CJNG, la FM y un grupo local el Cártel Nuevo Imperio (CNI).
En Chiapas la abierta guerra por el control de la frontera con Guatemala y otras zonas del estado se da entre el CJNG, el CP y el grupo local Cártel Mexico-Guatemala (CMG).
Ahora, y en el marco de la estrategia de seguridad del nuevo gobierno, que es la misma o muy semejante a la del gobierno anterior, no hay nada que indique que vaya a disminuir la guerra abierta entre los grupos del crimen organizado por el control del territorio.
Todo señala, a partir de las últimas masacres en el mes de octubre y noviembre del presente año, que se va a incrementar en esos siete estados y que se va a ampliar a otras entidades federativas.
La evidencia muestra que si se continúa con la estrategia de que la inseguridad se combate con las fuerzas federales, el avance del crimen organizado habrá de continuar y cada vez tendrá más control del territorio.
Aún es tiempo, para que la presidenta y comandanta en jefe cambie la estrategia, que siguieron sus antecesores, y concerte con las y los gobernadores que ellos se hagan cargo de la seguridad de sus estados en colaboración con el gobierno federal. Es el único camino.
@RubenAguilar