CAMINO A VALINOR | Mexicanos en grande

Por: José Inocencio Aguirre Willars

¡Hola! Muy buenos días, tardes o noches, dependiendo la hora en que me lean. 

Este pasado domingo y los días que le siguieron pudimos ver a muchos mexicanos triunfar en los máximos escaparates del cine y del deporte.

Por una parte, el gran Guillermo del Toro, el cineasta tapatío, quien anteriormente ya había sido galardonado con un Óscar como mejor director y por mejor película con La Forma del Agua, obtuvo este domingo su tercera estatuilla; en esta ocasión, por mejor película animada por Pinocho. Del Toro ha sido nominado también por películas como El Laberinto del Fauno y El Callejón de las Almas Perdidas, es decir, ha triunfado en grande en el mayor escenario del séptimo arte.

Ese mismo domingo, en paralelo a la entrega del Óscar, se estaba desarrollando el juego entre la novena de México y la selección de los Estados Unidos en el marco del Clásico Mundial del Beisbol (WCB por sus siglas en inglés).

Este torneo, creado por la Major League Baseball (MLB) y sancionado por la Confederación Mundial de Béisbol y Sóftbol, reúne a las mejores selecciones nacionales del mundo a fin de obtener al campeón del orbe. 

La ventaja de este formato, que arranca en el año 2006, es que cuenta por primera vez en un torneo de esta naturaleza, con jugadores profesionales pertenecientes a las máximas ligas alrededor del mundo, incluyendo por supuesto a la MLB. 

El equipo nacional de Japón se llevó las primeras dos ediciones, seguidos por República Dominicana y Estados Unidos, campeón reinante. La novena mexicana ha participado en todas sus ediciones, logrando su mejor resultado en 2006 cuando obtuvieron el sexto lugar.

Para esta quinta edición del WCB al día de hoy, el seleccionado nacional ya se encuentra calificado a la ronda de cuartos de final y espera a su próximo rival entre los equipos de Puerto Rico y República Dominicana. Su paso hasta este lugar no fue nada sencillo, tuvo que venir de atrás después de una dolorosa derrota en extra innings contra su primer rival, Colombia, para posteriormente derrotar contundentemente al campeón reinante, Estados Unidos, sacar un apretado juego contra el seleccionado de Gran Bretaña y vencer con autoridad a los canadienses. 

Es importante mencionar que en estos equipos militan grandes estrellas como Mookie Betts y Freddie Freeman de los Dodgers, Mike Trout de los Angelinos o Pete Alonso de los Mets, es decir, enfrentamos a los mejores del mundo y ganamos.

Deseo de todo corazón que esta selección mexicana, que, a diferencia de otras, si le compite de tú a tú a las mejores del mundo, continué su camino rumbo al campeonato mundial.

Lo que sí me queda claro es que una vez más los mexicanos demuestran que si se puede triunfar en las máximas esferas del ámbito en que se desarrollan. 

No nos dejemos engañar, por supuesto que está bien aspirar a ser mejores, a soñar en grande a competir contra los gigantes de este mundo. Quienes desde su propia pequeñez nos invitan a quedarnos chiquitos, únicamente demuestran su propio tamaño y el deseo de poder seguir siendo monarcas tuertos en un reino de ciegos.

Saludos a todas y a todos y por aquí nos vemos la próxima semana.