A la bascula

BANDURA

Cada día va llamando más la atención el caso del niño de 11 años de edad que asesinó a su maestra, hirió a varios de sus compañeros para luego suicidarse, esto sucede toda vez que la investigaciones en torno al caso van arrojando datos que se tornan netamente policiacos.

Sin embargo quienes no están acostumbrados a ese tipo de información y se inclinan más por la información formativa no deben perder el hilo de algo muy importante, y que coloca al niño en papel de victimario a víctima.

Esto porque bastaría con preguntarnos si un niño de esa edad en Coahuila, puede tener acceso a armas de fuego tan fácilmente aun y cuando una de esas armas es de uso exclusivo del ejército.

De igual manera resulta difícil entender que en un colegio con alumnos provenientes de familias con un poder adquisitivo muy por encima del promedio (independientemente del origen de sus recursos financieros) no se tengan las medidas preventivas para evitar el ingreso de este tipo de artefactos.

Albert Bandura psicólogo canadiense ampliamente conocido por su Teoría del Aprendizaje Social denominado TAS, propone que el proceso de aprendizaje tiene que ver con el entorno social del individuo, por ende, es muy importante centrar la atención en los agentes que intervienen para ese aprendizaje, o sea, lo que rodea a ese individuo.

Bandura admite que cuando el individuo aprende, es porque está ligado a procesos de condicionamiento y refuerzo positivo y negativo, es decir, no se entiende el comportamiento de un individuo sin considerar el entorno y las presiones externas que sobre el individuo se ejercen.

De qué manera se puede explicar que un niño de 11 años tenga una habilidad para disparar de tal manera que ocho de los nueve disparos que realizó encontraran un blanco.

Resulta igual de complejo comprender que una persona a esa edad tenga las agallas como para después de disparar contra una autoridad (la maestra) y contra personas del diario convivir, pueda concentrarse para atentar contra sí mismo logrando el objetivo de arrancarse la vida.

Dígame lo que usted experimenta cuando por casualidad digamos, se encuentra con una persona muerta producto de un accidente automovilístico; y eso que usted es una persona adulta cuya mente está preparada para el buen manejo de las habilidades socioemocionales.

De llegar a buen puerto las investigaciones que en estos momentos está realizando la fiscalía estatal y las autoridades federales tendremos que reflexionar como padres en la campaña emprendida en el 2006 por la asociación australiana para la prevención del abuso y el maltrato infantil denominada “childrens see, childrens do”.

De lo contrario tendremos que preguntarnos dónde, con quién, de qué manera y en qué momento el chico adquirió esas habilidades, porque para ello un videojuego no basta.