MOISÉS SANTIAGO H
“Mi esposo estaba muy ilusionado con el bebé, tenía diez días de nacido todos los días llegaba y se ponía a jugar con él, ya me había dicho que cambiaría de trabajo”, cuenta Melisa Flores Villa esposa de Ramiro Torres Rodríguez quien mantiene viva la esperanza de reencontrarse con su marido. Dijo que ya tenía planes de buscar otro trabajo porque era muy peligroso estar en pocito, pero ya no alcanzó.
Melisa relató que desde antes de que naciera el bebé, Ramiro estaba muy ilusionado porque iba a ser niño y cuando llegó la ocasión del parto estuvo presente y lo cuidaba de manera extrema, dijo : “No lo dejaba llorar, cualquier cosa que veía solo estaba atento a lo que necesitaba mi hijo”.
Señaló que se ponía a platicar de los riesgos que había en el pocito donde trabajaba y ahora que había nacido el pequeño Ramiro ya quería salir en busca de otro trabajo pero ya no le alcanzó el tiempo “yo quisiera que me lo entreguen vivo”, reiteró.
Dijo que se aferra a creer en un milagro aunque ya ha pasado mucho tiempo y no se ha conseguido hacer nada para rescatarlos, entre un suspiro Melisa dijo, “ya no le alcanzó el tiempo a mi Ramiro para cambiar de trabajo”.