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MEDIAFOBIA

Foto Especial

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08 de Agosto 2019

El centro de leyes de pobreza del sur es una organización no gubernamental conocido como SPLC por sus iniciales en inglés que realiza estudios encaminados a detectar y hacer visibles a grupos “extremistas” llamados en Estados Unidos “grupos de odio” que promueven acciones de hostilidad o violencia contra determinados grupos de la sociedad norteamericana.

Sea por su orientación sexual, color de piel, nacionalidad o etnia religiosa estos grupos generan un ambiente poco o nada favorable en cualquier sociedad sea del primer o tercer mundo que luche constantemente por la inclusión y el respeto a los derechos humanos.

Un dato interesante producto de esos estudios índica que desde que el actual presidente comenzó su carrera por la casa, blanca éstos grupos de odio han aumentado en número, y por ende ha aumentado violencia al menos en forma potencial en los Estados Unidos de América.

Un paralelismo que nos debe alertar se vive con el ejercicio del periodismo en México, pues en apenas ocho meses del mandato Lopez Obradorista 14 colegas han sido asesinados.

No son pocos los que coinciden conmigo, el discurso de desacreditación contra la prensa o al menos con un amplio segmento de la prensa mexicana alimenta en mucho la “mala leche” con que se ve al periodista en nuestro país.

De acuerdo con Reporteros Sin Fronteras desde hace un año se advierte que a nivel mundial cada vez más jefes de estado electos por la vía democrática, ven a la prensa como un adversario en toda la extensión de la palabra.

El periodismo en México sabe hoy, dicho por el propio presidente, lo que le va a pasar si no se porta bien con la federación, palabras más palabras menos durante una de las conferencias mañaneras.

AMLO piensa como Arturo Pérez-Reverte en el sentido de que el político debe tener miedo frente a un periodista; y producto de ese miedo, le asiste el derecho de defenderse como pueda.

Idea más equivocada no puede haber. Cualquier periodista es a final de cuentas un voto más o un voto menos en la elección democrática de cualquier sociedad.

Es al final del día la sociedad informada, enterada y formada la que con elementos de juicio en las manos – tal vez producto del ejercicio periodístico- la que decide finalmente si un político merece el lugar a donde llegó y a lo mejor una nueva oportunidad.

La mediafobia que asiste no solo al presidente López Obrador, sino también   a varios personajes de la política mexicana les va impedir concentrarse en la ejecución del plan de trabajo que ofertaron en campaña y con ello ganarse una nueva oportunidad para seguir trabajando por el pueblo. Es esa, y solo esa la única manera como lograrán callar bocas de quienes no votaron por ellos y de paso refrendar la confianza de quienes con su sufragio los llevaron a donde hoy se encuentran.