Al que le harán ver su suerte los campesinos es al gerente de Agsal

Al que le harán ver su suerte los campesinos de Carneros, La India, Palmas Altas y Tinajuela –ubicados al sur de Saltillo –es al gerente de Agsal, Jordi Bosh Bragado, quien por cierto, está por completar 10 meses al frente de la paramunicipal.

Desde hace años, quizá una década, los ejidatarios emprendieron juicios y demandas ante tribunales agrarios para exigir un mayor pago por las tierras y evitar la explotación irracional del agua que abastece a la capital del estado.

Desde el inicio de la construcción del Complejo Carneros, las afectaciones para esta región eran evidentes y en su momento, fueron denunciadas por habitantes de estas alejadas comunidades.

La Comisión Estatal de Aguas (CEAS) fue la dependencia encargada de poner en marcha el proyecto de extracción del vital elemento y ahora son los perritos de la pradera, el ganado y los cultivos, los que enfrentan las consecuencias de la sobreexplotación de los mantos freáticos en Carneros.

Los propietarios de los terrenos donde están ubicados los pozos y tanques de almacenamiento al sur de Saltillo, amagaron con iniciar protestas e incluso con apostarse frente a Palacio de Gobierno si el gerente Jordi Bosh no arregla el problema que tiene encima.

Habrá Firmas y Señales si el gerente de Agsal no atiende las demandas. Carneros, Zapalinamé y Loma Alta son los tres complejos que alimentan las líneas de abasto en Saltillo y si, en efecto, nadie puede negar que hubo manejo turbio y ventajoso en la compra de terrenos a ejidatarios de Carneros de donde se extrae el agua que administra y por la que recibe jugosas ganancias la empresa Aguas de Saltillo.