A La Báscula

Que no se nos olvide

Julián Parra Ibarra

No, aunque lo que le ha seguido tenga una secuencia de serie de Netflix o de guion cinematográfico, lo ocurrido el viernes pasado en nuestra querida Comarca Lagunera –lamentablemente-, no es una película, es una triste, dolorosa y terca realidad, que se ha empeñado en golpearnos directamente en el rostro.

Por donde quiera que se le vea, esto es una tragedia que nos debe preocupar, pero más ocupar, a todos como sociedad: sí a padres e integrantes de las familias, pero también a las escuelas y universidades, a las autoridades de los distintos niveles, a las cámaras y organismos empresariales, a los medios de comunicación, a las iglesias, a las sociedades de padres de familia y organizaciones de la sociedad civil, a todos.

Durante mucho tiempo sucesos de esta naturaleza registrados –con mayor frecuencia- en Estados Unidos, los veíamos muy lejanos, como si se tratara de otro planeta que estuviera en otra galaxia, creíamos que algo como esto, no, aquí no nos va a tocar, porque acá no hay una disponibilidad de armas de todos los calibres como si se tienen del lado norte de nuestra frontera.

Y cuando la tragedia tocó una puerta más cercana, en Monterrey, dijimos que tampoco, que la Sultana del Norte es una ciudad más grande, y que nuestro Torreón, nuestra Laguna, no está tan desarrollada ni tan descompuesta.

Como sociedad no hicimos nada para prevenir lo que ya nos sucedió, y ahora que ha ocurrido el impacto ha sido demoledor, nos conmocionó a todos, nos movió hasta las más sensibles fibras de nuestro ser, todavía muchos estamos pasmados no logramos entender qué hicimos mal o qué fue lo que dejamos de hacer sobre todo con quienes, suponemos todos, es el tesoro más grande del mundo.

Desgraciadamente lo hecho, hecho está y no se puede dar vuelta atrás a la manija del tiempo, pero hoy el compromiso de todos es mirar al frente para que algo como esto jamás vuelva a ocurrir. En mayor o menor medida, a todos nos toca una parte de la responsabilidad y también del compromiso para el futuro.

No, no volvamos a dejar que nos gane la históricamente cortedad de memoria, que nos lleva a olvidar rápidamente lo que jamás debemos ignorar. Lo del viernes pasado no es un día para olvidar, por el contrario, es un día que debemos tener siempre presente, para que no se nos olvide que cada día tenemos que aportar nuestro granito de arena para que una historia como esta, jamás, se vuelva a repetir.

@JulianParraIba