México “sobre invadido” de ambientes nutricionales que dañan la salud

México, 16 Abr (Notimex).- El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell Ramírez, reconoció que México está “sobre invadido” de ambientes nutricionales que privilegian por encima de la salud a los productos ultraprocesados, calorías vacías, azúcares añadidos, grasas saturadas y sal, entre otros. 

Aseveró que “los ciudadanos no somos libres, si no formamos parte de economías de mercado en las que el Estado ha dejado a un lado sus responsabilidades en la regulación, orientación, control de espacios y entornos de salud”.

Al inaugurar el foro “Fortalecimiento de la Alimentación y Entornos Escolares: Rumbo a una Política Pública Alimentaria Integral”, pidió dejar atrás los eufemismos y planteamientos genéricos de que no hay alimentos buenos, pues la ciencia ha definido los que son saludables y los que no son necesarios.

Explicó que los que han demostrado que no son saludables, ni necesarios deben ser sujetos de regulación en el acceso, distribución, publicidad y en entornos específicos como el educativo, en particular cuando se vela por el bien superior de la infancia.

López Gatell Ramírez consideró que estos artículos deben ser sometidos a regulaciones del mismo modo que se ha hecho con productos accesorios y adversos a la salud como el tabaco o el alcohol.

Comentó que, por ello, en la integración del Plan Nacional de Desarrollo se construye una política de Estado por la salud y la alimentación saludable con una visión integral, pues los grandes problemas no se pueden resolver con sectarismos, fragmentación o esfuerzos descoordinados.

“El problema que hoy nos ocupa es largo, trascendente y si no actuamos hoy, seguirá siendo de graves y grandes consecuencias para la integridad, la estabilidad y la preservación del país”, expuso.

El subsecretario de Salud dijo que no se pueden negar problemas como la obesidad, el sobrepeso, la diabetes y el conglomerado de enfermedades crónicas que no sólo tienen impacto en la salud, sino además en la educación, el desarrollo y bienestar de las personas.

Mencionó que así es como se debe visualizar el problema de mala nutrición, tanto por carencia como por exceso de una alimentación no saludable “que nos aqueja al menos desde la década de los años 80″.

Por ello, insistió en que se aspira a definir una política de Estado, no sólo de gobierno o de una administración, y que tenga el concurso de la integralidad de los poderes.

Explicó que se trabaja de manera coordinada sin excluir a nadie y, por el contrario, se ha invitado a la participación social organizada, en la que el Gobierno de la República no es enemigo de la inversión privada.

En la definición de una política de Estado que atienda los determinantes estructurales del problema de sobrepeso y obesidad, sobre todo infantil, “se ha malversado la información haciéndonos ver como enemigos del sector privado”, abundó.

Agregó que su obligación histórica y ética es velar por los intereses públicos de largo alcance y hoy se sabe con claridad que la alimentación no saludable, excedida en calorías vacías, azúcares añadidos, grasas saturadas y sal “son los elementos estructurales directos que más influyen sobre los daños a la salud”.

 

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