Derrumbe en mina clandestina deja un muerto

Monclova, Coahuila / 11 de Julio de 2019

Por: Guadalupe Pérez

Luego de casi 21 horas de que una mina clandestina se derrumbara e inundara en el ejido La Mota, en Múzquiz, brigadistas y elementos de Protección Civil lograron sacar el cuerpo del trabajador Juan Manuel Galván Robledo de 40 años que quedó atrapado desde las 6 de la tarde del pasado martes.

De acuerdo con Víctor Guajardo, director de Protección Civil de Múzquiz, seis personas laboraban en esta mina clandestina, cuando al perforar una pared que colindaba con otra mina inundada, sobrevino el derrumbe y el agua que había acumulada en el viejo cañón, alcanzó a los trabajadores y solo cinco pudieron escapar.

El minero que quedó atrapado fue identificado como Juan Manuel Galván Robledo, vecino del ejido Rancheritas; el percance ocurrió alrededor de las seis de la tarde del martes pero según autoridades fue reportado hasta las 23:30 horas.

Se sabe que de inicio, los trabajadores trataron de rescatar a su compañero pero al verse imposibilitados, dieron aviso a las autoridades, sumándose a Protección Civil, grupos de rescatistas de otras mineras de la región Carbonífera como la Minera del Norte, del grupo GAN.

El director de Protección Civil indicó que en las maniobras para rescatar al minero, se utilizó una bomba para desaguar la mina de arrastre, la cual aunque es pequeña albergaba a seis personas de las que sobrevivieron cinco.

De igual manera, precisó que entre los sobrevivientes se encuentra el padre de Juan Manuel Galván Robledo cuya viuda Martha Magaly Velázquez al llegar al lugar, pidió justicia y exigió a los propietarios que dieran la cara, pues prácticamente los dejaron abandonados tras informarles del accidente.

Los sobrevivientes indicaron a las autoridades de Protección Civil y de la Secretaría del Trabajo que al ocurrir el accidente, informaron a uno de los dueños de la mina sobre lo ocurrido pero después cortó comunicación con ellos y hasta ayer al mediodía no se había presentado en el lugar.

Siendo que los propietarios Ricardo Lucio, Juan Manuel Martínez y Felipe Ríos no acudieron a esta mina que funcionaba ilegalmente pues luego de ser clausurada, reanudó operaciones hace un año sin los permisos correspondientes.